Desde su inicio, el Bitcoin se ha caracterizado por ser una moneda digital con un suministro limitado a 21 millones de unidades. Sin embargo, a diferencia de otras monedas, el Bitcoin no se imprime o acuña, sino que se “mina” a través de un proceso llamado halving. Esto quiere decir que, a medida que más bitcoins son extraídos del mercado, el halving ocurre para reducir la tasa de nuevos bitcoins que se generan. Esto asegura que el suministro de Bitcoin se mantenga estable y se reduzca a la mitad aproximadamente cada cuatro años. Esto significa que el halving es un evento programado y predeterminado que tiene lugar en la cadena de bloques de Bitcoin.
El primer halving tuvo lugar el 28 de noviembre de 2012, cuando la tasa de nuevos bitcoins se redujo de 50 a 25. El segundo halving tuvo lugar el 9 de julio de 2016, cuando la tasa de nuevos bitcoins se redujo de 25 a 12,5. Ahora, el tercer halving está programado para el 11 de mayo de 2020, lo que significa que la tasa de nuevos bitcoins se reducirá a la mitad de 12,5 a 6,25. A partir de entonces, se espera que el halving ocurra cada cuatro años, aproximadamente, hasta que el suministro de Bitcoin se agote en algún momento del año 2140.
Como se mencionó anteriormente, el halving tiene como objetivo mantener el suministro de Bitcoin estable. Esto se logra reduciendo la tasa a la que se generan nuevos bitcoins. Debido a que el halving está programado y se produce a intervalos regulares, se espera que tenga un impacto en el precio del Bitcoin. Esto se debe a que, con menos nuevos bitcoins siendo minados, la oferta se reduce y, por lo tanto, se espera que el precio del Bitcoin aumente. Sin embargo, el impacto del halving en el precio del Bitcoin no es tan directo o simple. Se han producido dos halvings anteriores y, en ambos casos, el precio del Bitcoin no se vio significativamente afectado inmediatamente después del evento. Sin embargo, en ambos casos, el precio del Bitcoin experimentó un aumento significativo en el transcurso de los meses o años siguientes.
El primer halving tuvo lugar cuando el precio del Bitcoin estaba en aproximadamente $12. A partir de ahí, el precio del Bitcoin no aumentó significativamente en los meses inmediatamente después del halving. Sin embargo, después de un año, el precio del Bitcoin se disparó y alcanzó un máximo de $1,100 en noviembre de 2013. Luego, el precio del Bitcoin cayó y no volvió a alcanzar ese nivel hasta mediados de 2017.
El segundo halving tuvo lugar cuando el precio del Bitcoin estaba en aproximadamente $650. A partir de ahí, el precio del Bitcoin no aumentó significativamente en los meses inmediatamente después del halving. Sin embargo, después de un año, el precio del Bitcoin se disparó y alcanzó un máximo de $19,783 en diciembre de 2017. Luego, el precio del Bitcoin cayó y no volvió a alcanzar ese nivel hasta mediados de 2019.
Como se puede ver, el impacto del halving en el precio del Bitcoin no es inmediato. Sin embargo, en ambos casos, el precio del Bitcoin aumentó significativamente en el transcurso de los meses o años siguientes. Esto se debe a que, con menos nuevos bitcoins siendo minados, la oferta se reduce y, por lo tanto, se espera que el precio del Bitcoin aumente a largo plazo. Debido a esto, muchos inversores y especuladores compran bitcoins antes de que ocurra un halving, con la esperanza de que el precio del Bitcoin aumente en el futuro.
Aunque el impacto del halving en el precio del Bitcoin no es inmediato, se espera que tenga un impacto a largo plazo. Como se mencionó anteriormente, el halving tiene como objetivo mantener el suministro de Bitcoin estable. Esto se logra reduciendo la tasa a la que se generan nuevos bitcoins. Debido a que el halving está programado y se produce a intervalos regulares, se espera que tenga un impacto en el precio del Bitcoin. Esto se debe a que, con menos nuevos bitcoins siendo minados, la oferta se reduce y, por lo tanto, se espera que el precio del Bitcoin aumente. Sin embargo, el impacto del halving en el precio del Bitcoin no es tan directo o simple. Se han producido dos halvings anteriores y, en ambos casos, el precio del Bitcoin no se vio significativamente afectado inmediatamente después del evento. Sin embargo, en ambos casos, el precio del Bitcoin experimentó un aumento significativo en el transcurso de los meses o años siguientes.